Judit, capítulo 3 (Versión: Biblia de Jerusalén)
Judit, capítulo 3 |
Judit 3 - Biblia Católica
1.Entonces le enviaron mensajeros para decirle en son de paz:
2.«Nosotros, siervos del gran rey Nabucodonosor, nos postramos ante ti. Trátanos como mejor te parezca.
3.Nuestras granjas y todo nuestro territorio, nuestros campos de trigo, los rebaños de ovejas y bueyes, todas las majadas de nuestros campamentos, están a tu disposición. Haz con ellos lo que quieras.
4.También nuestras ciudades y los que las habitan son siervos tuyos. Ven, dirígete a ellas y haz lo que te parezca bien.»
5.Los enviados se presentaron ante Holofernes y le comunicaron estas palabras.
6.Entonces él bajó con todo su ejército al litoral, puso guarniciones en las ciudades altas, y les tomó los mejores hombres en calidad de tropas auxiliares.
7.Los habitantes de las ciudades y todos los de los contornos salieron a recibirle con coronas y danzando al son de tambores.
8.El saqueó sus santuarios y taló sus bosques sagrados, pues había recibido la orden de destruir todas las divinidades del país para que todas las gentes adorasen únicamente a Nabucodonosor y todas las lenguas y todas las tribus le proclamasen dios.
9.Llegó después frente a Esdrelón, junto a Dotán, que está ante la gran sierra montañosa de Judea,
10.acamparon entre Gueba y Escitópolis y se detuvo allí un mes, haciendo acopio de provisiones para su ejército.
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